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La litrona de plástico tiene premio en Portugal, 5 céntimos. Una orden del Ministerio de Medio Ambiente obliga a que antes de final de año se aplique un descuento por la devolución de botellas PET (tereftalato de polietileno), que variará en función de su tamaño.
El Gobierno portugués ha dado otro paso para reducir el consumo de plástico. Primero fueron las bolsas de las compras, luego los sorbetes para beber, después las bolsas de verdulerías y panaderías, ahora le llega el turno a los recipientes de plástico PET, principalmente empleados para agua, zumos y refrescos, con el código de barras visible.
Si en el caso de las bolsas, la política es de recargar el precio en el consumidor, en el caso de la devolución de botellas -no hay medidas sobre la devolución de bolsas- se premia al consumidor. La recompensa por la devolución será de dos céntimos si la capacidad de la garrafa es inferior al medio litro y de cinco céntimos si su capacidad es superior. Los valores podrán ser revisadas al alza, en función del cumplimiento de los objetivos medioambientales.
En cualquier caso, nunca será dinero en efectivo, sino el equivalente en descuentos en futuras compras, vales descuento, participación en sorteos o en donativos a instituciones de finalidad social.
Desde hace seis años, los portugueses participan en sorteos de bonos del Estado -al inicio el premio eran coches de lujo- a cambio de dar su número de contribuyente cuando realizan alguna compra. Fue una campaña iniciada por el anterior Gobierno con el fin de aflorar facturas y dinero oculto. Ahora, el incentivo es para mejorar el medioambiente y reducir el uso de productos no reciclables. Durante esta legislatura, el Gobierno socialista comenzó a sustituir su parque móvil con vehículos eléctricos y para la próxima legislatura promete un fuerte aumento de impuestos a los productos más contaminantes.
En el primer semestre del año, el reciclaje de embalajes aumentó un 11% en Portugal, según la Sociedad Ponto Verde. Los mayores incrementos fueron en papel (16%), aluminio (13%) y cristal (10%) y el menor, precisamente, en el reciclaje de plástico (5%), aunque la organización lo atribuye a la continua retirada de productos con ese material.
Para la entrada en vigor de la devolución de botellas de plástico, los supermercados deberán disponer de contenedores, tal como ocurre ya con los recipientes de pilas o bombillas. La presidenta de Ponto Verde, Ana Isabel de Morais, destaca en el continuo aumento del reciclaje la modernización de los camiones de recogida selectiva y la apuesta por la recogida puerta a puerta. “Las personas consumen menos plástico por una sensibilización real y efectiva”, ha declarado a la agencia Lusa De Morais. “La gente adopta comportamientos más responsables y los productores de los embalajes también”.
Fuente: El País
